Una pareja tenía originalmente un monoambiente en un edificio en el barrio de Palermo. Luego, al ampliar su estructura familiar, decidieron comprar el departamento vecino, que era un 2 ambientes. El desafío fue unir ambos departamentos, para generar un departamento de 3 ambientes.
Fue un hermoso proyecto en el cual se logró adaptar el espacio a las transformaciones familiares.
El proyecto se realizó en conjunto con el Estudio Loft.